EL ORGULLO PATRIO Y SI EXCÁLIBUR HUBIERA VIVIDO EN EL BARRIO SALAMANCA
Cuando salí de España por primera vez, recuerdo haberme quedado boquiabierta. Eran los años ochenta y Montreal, en donde pasé una larga temporada, era una ciudad limpia y moderna, nada que ver con lo que yo dejaba atrás. Más tarde, regresé empujada más por el amor a los míos y a la juerga que por…