ME LIBRÉ DE LAS PREFERENTES GRACIAS A SAN INTERNET
Vale, ahora te cuento lo de las Preferentes – le digo a Bardita que lleva una semana persiguiéndome para que traiga al blog esta historia-. Reconoce que estás hecha una vaga – dice contoneándose ante mí -. ¡Quién fue a hablar! Te recuerdo que eres tú la que se pasa el día tumbada panza arriba. Ya…